En la reunión mantenida hoy entre las organizaciones sindicales de la Mesa Sectorial y la Consejería, la administración ha comunicado la ruptura unilateral de las conversaciones sobre el aumento de las plantillas docentes. Tras meses de aplazamientos y dilaciones, finalmente la Consejería ha dado por zanjadas las negociaciones con los sindicatos docentes, cerrándose en banda a cualquier medida que suponga un aumento de la inversión en  Educación Pública en Andalucía.

Las negociaciones se abrieron ya en el primer trimestre gracias a la presión de USTEA y el resto de organizaciones sindicales de la Mesa Sectorial. Para nuestro sindicato, el aumento de las plantillas de todos los cuerpos y especialidades era y sigue siendo una urgente necesidad de la Educación Pública andaluza y la única vía para aliviar los importantes déficits que arrastra y poder así:

• bajar las ratios en todos los niveles educativos y establecer ratios adecuadas en las aulas específicas
• mejorar la atención a la diversidad, con la dotación de profesionales de Orientación Educativa, Pedagogía Terapeútica y Audición y Lenguaje a todos los centros educativos y por cada 250 alumnas y alumnos
• reducir el horario lectivo del profesorado, terminando con prácticas abusivas como el llamado 2×1 en Primaria y la generalización de horarios por encima de las 18 horas en Secundaria
• mejorar las condiciones de trabajo del profesorado, atendiendo a la salud mental del profesorado y a las necesidades de desburocratización
• dignificar la labor del personal interino.

La Consejería no ha dado muestras, en ningún momento, de una verdadera actitud negociadora y las conversaciones se han desarrollado entre excusas, dilaciones y aplazamientos, tímidos pasos adelante y frenazos, cuando no pasos atrás, en los términos y planteamiento de la negociación. A pesar de todo, las organizaciones sindicales hemos hecho grandes esfuerzos por mantener abierta la vía del diálogo, hasta el último momento.

Tras los contactos previos, la primera reunión de estas negociaciones tuvo lugar el 15 de noviembre y entonces valoramos que el planteamiento inicial de la administración educativa estaba muy alejado de las reivindicaciones de la comunidad educativa. Solo después de la movilización del 29 de noviembre, convocada ante las delegaciones provinciales por USTEA y CCOO, la Consejería comenzó a dar tímidos pasos hacia un marco negociador que parecía abrir la puerta a una vía de diálogo. Desde entonces y a lo largo de todo el segundo trimestre, nuestros intentos por avanzar en esta vía se han encontrado con constantes dilaciones y maniobras de distracción por parte de la administración.

En la Mesa de hoy, la Consejería ha roto las definitivamente las negociaciones y se ha cerrado a cualquier diálogo en relación al aumento de las plantillas, con la excusa de que se han prorrogado los presupuestos estatales. Así, la administración educativa parece renunciar al ejercicio de las competencias de nuestro Estatuto de Autonomía, mientras desarrolla una política fiscal y una distribución del gasto que solo pueden entenderse como un ataque al sector público en general y a la Educación Pública y sus profesionales en particular.

En estas circunstancias, USTEA estudia ya la convocatoria de movilizaciones para que la comunidad educativa sea escuchada y la Consejería rectifique su posición e inicie un verdadero proceso negociador para el fortalecimiento de la Educación Pública y la dignificación del trabajo docente.