El Norte de la provincia de Granada es una de las zonas más deprimidas de nuestro territorio. La falta de perspectivas económicas y el abandono de las administraciones llevan tiempo provocando un fuerte despoblamiento y una tasa de envejecimiento de la población muy por encima de la media. Si a esto le sumamos la liquidación de los servicios públicos, como es el caso de la Educación, estaremos sentenciando a muerte a toda una comarca, y de facto, atribuyendo la categoría de ciudadanos/as de segunda a las personas que allí viven.

Nuestros políticos deben saber que los servicios públicos no son una inversión de la cual se obtenga una rentabilidad económica y/o política a corto plazo. Es esa visión cortoplacista la que ha llevado a la Delegación de Educación de Granada a recortar el número de maestros en las escuelas de Galera, Orce y La Puebla de Don Fabrique. El número de alumnos en estas escuelas ha ido descendiendo dramáticamente en estos municipios, y como resultado se han producido agrupamientos de distintos cursos, con la consiguiente pérdida de maestros.

Así por ejemplo,  el CEIP Cristo de La Expiración de Galera ha perdido dos grupos, pasando de tener 7 grupos en el curso 2017/18 a tener 5 en el presente curso 2018/19, y como resultado de esto ha perdido no solamente los dos maestros asignados a estos grupos, sino también la asignación de especialista en Pedagogía Terapéutica, imprescindible para atender al alumnado con necesidades educativas especiales.

Algo similar es lo que ha ocurrido en Orce y La Puebla de Don Fabrique. Nos encontramos con una infradotación de profesorado que hace imposible organizar los apoyos necesarios para el alumnado que necesite una atención específica, además de convertir los centros en un caos cuando por algún motivo falta  algún maestro. Se está recortando el derecho a la Educación de los niños y niñas de estos municipios.

En este sentido, las familias del alumnado de los municipios de Orce, Galera y La Puebla de Don Fabrique vienen reclamando durante este primer trimestre soluciones a la Delegación de Educación de Granada. Reclaman algo muy básico: una dotación suficiente para sus escuelas, porque liquidando la escuela en la zona norte se está condenando al abandono de sus habitantes.

Han sido las movilizaciones de las familias las que han conseguido que La Puebla de Don Fabrique por fin tenga un maestro más para su escuela. Queda pendiente una solución para Orce y Galera. Para reclamar esta solución  han sido necesarias concentraciones, manifestaciones, encierros, y ahora, una huelga de padres y madres.

El martes 27 de noviembre el Delegado de Educación de Granada se reunirá con las familias. Las movilizaciones están suspendidas a la espera del resultado de la negociación. Esperemos que la Administración esté a la altura de las familias que llevan reclamando lo que les corresponde por derecho. Desde USTEA exigimos al Sr. Delegado que no juegue al divide y vencerás y que asuma su responsabilidad de dotar a los alumnos y alumnas de Galera y Orce de los servicios educativos que se merecen. Porque como reza la pancarta “SIN EDUCACIÓN NO HAY FUTURO”.

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