Tras una larga lucha de las asociaciones de madres y padres, apoyada por USTEA y otras organizaciones de la comunidad educativa, la proposición de Ley presentada por Adelante Andalucía es aprobada en el Parlamento, lo que supone un paso importante para poner fin a décadas de profundas deficiencias en los centros educativos andaluces.
El pasado 10 de marzo se aprobó el dictamen sobre la Proposición de Ley relativa a la mejora de las condiciones térmicas y ambientales de los centros educativos andaluces mediante técnicas de bioclimatización y uso de energías renovables en los espacios educativos de Andalucía en la Comisión Parlamentaria correspondiente, por lo que tan solo faltaba la aprobación en el Pleno del Parlamento, que se ha producido hoy, para que esta necesaria ley, aunque insuficiente en algunos aspectos, viera la luz.
Desde USTEA hemos defendido esta iniciativa, incluso en sede parlamentaria, y celebramos positivamente esta nueva legislación por varios motivos:
En primer lugar, es un paso importante para comenzar a solventar una triste realidad de inaceptables deficiencias en las infraestructuras de cientos de centros educativos de nuestra comunidad. Esta nueva Ley abre la puerta a una serie de actuaciones que permitirán que tanto trabajadores y trabajadoras como alumnado pueda ejercer su derecho, al trabajo y a la educación respectivamente, en unas condiciones dignas y adecuadas, además de poder afrontar en mejores condiciones los retos ecológicos a los que nos enfrentamos como sociedad. La educación pública tiene que ser consciente del cambio climático y sus consecuencias para la formación de personas responsables con el medioambiente y el desarrollo de estilos de vida saludables y sostenibles.
Por otro lado, y no menos relevante, esta Ley es el resultado de un largo proceso de lucha plagado de obstáculos políticos y de palos en la rueda. Han sido años en los que la nula voluntad política ha imposibilitado avanzar hacia la solución de las problemáticas que se han venido denunciando. Por ello, es muy importante entender esta Ley como una victoria de la lucha de los y las que estamos en la base de nuestro sistema educativo, que hemos sido capaces de doblegar la cerrazón y falta de voluntad de las administraciones educativas. En este sentido, ha sido muy importante el papel de las asociaciones de padres y madres incluidas en la Plataforma Escuelas de Calor, que han sido capaces de poner este problema encima de la mesa e incluirlo en la agenda política andaluza.
Sin duda, en los tiempos que corren para la Escuela Pública, y para los Servicios Públicos en general, nos va a tocar enfrentarnos a políticas y a problemáticas importantes. Tocará seguir luchando para que esta Ley que hoy se aprueba no quede en papel mojado, por seguir mejorando y ampliando las medidas que en ella se contemplan y, como no, para conseguir una Escuela Pública de calidad, de todos y todas, para todos y todas.
Andalucía, 3 de junio de 2020