Emiliana de USTEA Córdoba, “un sindicato asambleario, laico, feminista, coeducativo, defensor de la escuela pública,…”

26 - noviembre - 2010 Sin categoría

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Redacta Carolina Ferrer

En aras de acercaros al lado más personal de las gentes que trabajamos en USTEA, os presentamos una serie de entrevistas que queremos que reflejen otra cara, más humana, de las/os responsables sindicales.

-Emiliana, ¿puedes contarnos en qué momento nació tu relación con USTEA y cómo se inició?

Vine a vivir a Córdoba hace unos diez años y por aquel entonces yo ya sabía de la existencia de USTEA, porque había votado a esta organización sindical en más de una ocasión, aunque nunca hasta ese momento había militado en sindicato alguno.

A través de unos familiares conocí a las mujeres que en ese momento trabajaban en la Secretaría de la Mujer de USTEA y me pareció que estaban haciendo un trabajo muy interesante (una unidad didáctica sobre mujeres andaluzas). En fin, que me puse a trabajar con ellas  y aprendí mucho además de pasarlo muy bien.

Esto me permitió descubrir que USTEA era un sindicato que respondía a mis demandas de una organización sindical. Se trata de un sindicato asambleario, laico, feminista, coeducativo, defensor de la escuela pública,…

Más tarde trabajé como liberada de miércoles y con esta liberación parcial fui conociendo más a fondo el sindicato: su trabajo en defensa de la escuela pública y de calidad, del profesorado… En 2007, me propusieron la liberación a tiempo completo y acepté.

 

-Tú formas parte de USTEA Córdoba, cuéntanos un poco cómo os organizáis en vuestra sede, quiénes estáis allí y cómo es vuestro día a día, por favor.

En este momento, estamos tres personas liberadas en la sede: Pablo, que se ocupa de todo lo relacionado con Infantil, Primaria y Educación de Adultos;  al tiempo que Paco, el otro compañero liberado, y yo nos encargamos de todas las cuestiones relacionadas con Secundaria, Formación Profesional y Enseñanzas de Régimen Especial.

Por otra parte, no podemos olvidar nuestra especial atención a colectivos muy específicos como son los interinos y los aspirantes a interinos con los que hemos trabajado y seguimos trabajando muy de cerca.

Trabajo de sede es también el mantenimiento de la base de datos, la organización de la propia sede, los trabajos de campo como por ejemplo recoger datos sobre la implantación del mal llamado “Plan de Calidad”, la cobertura de bajas, etc., sin olvidarnos de un tema tan importante como es la coeducación.

Pero fundamentalmente consideramos esencial  y prioritario la atención a la afiliación y las visitas a los centros educativos de toda la provincia. A lo largo de cada curso escolar tratamos de llegar al mayor número posible de centros, tanto de Infantil y Primaria como de Secundaria. Para ello contamos también con la ayuda de las personas liberadas de miércoles.

A todo esto hay que añadirle las reuniones orgánicas, más aquellas otras que surgen con la Administración  y que son propias del funcionamiento sindical.

  Como ves, organizarnos no es difícil, lo difícil  es tener suficiente tiempo para  realizar las tareas que diariamente nos proponemos más otras que surgen sobre la marcha.

 

-Entonces, como nos cuentas y como nos estamos dando cuenta a lo largo de esta serie de entrevistas, también lucháis contra otro caballo de batalla: el tiempo. ¿O me equivoco?

Por supuesto. Cuando cerramos el ordenador –entre las 14,30 y las 15 horas- siempre nos queda la sensación de que hemos tenido una jornada muy intensa de trabajo, pero que quedan muchas cosas por hacer, y nos vamos ordenando mentalmente las prioridades para la tarde o el día siguiente. No solamente es el trabajo en sede, las visitas a centros educativos o las reuniones orgánicas e institucionales, también está una presencia en la calle en cualquier acto reivindicativo relacionado con movilizaciones  sociales en general y con la educación en particular.

Esta dedicación en tiempo a la actividad sindical, por la propia dinámica, nos obliga a renunciar a otro tipo de actividades con la familia, los amigos,  o simplemente  tenemos que excusar nuestra presencia en distintos actos organizados en la ciudad por la incompatibilidad horaria con nuestro  trabajo. Siempre hay que priorizar, y es evidente que la prioridad es la sindical.

-Bueno, pero cuando por fin consigues robarle un poquito de tiempo libre al reloj al margen de todo esto, ¿a qué te gusta dedicarlo?

Cuando queda algo de tiempo libre, me gusta estar con la familia, con mi pareja, quedar con los amigos para ir al cine,  asistir a un concierto de música, dar un paseo por Córdoba y tomar unas cervecitas… o bien hacer una comidita en casa con gente muy cercana. Soy bastante “cocinitas”.

También disfruto de la lectura de un buen libro o dando un paseo por el campo.  Una de mis aficiones favoritas es ir de senderismo, “patear el campo”. Ello me permite hacer deporte divertido, conocer y acceder a lugares que de otra forma es imposible y me relaja bastante.

Es todo, Emi, muchas gracias por darnos la oportunidad de conocerte un poco.