Entre el 15 y el 30 de junio se desarrolla la matriculación de nuevo ingreso en la red de centros públicos de FP de Andalucía. USTEA exige que en este procedimiento se atienda la demanda del alumnado en los centros públicos y la juventud andaluza no se vea abocada a engordar el negocio de la FP privada, como ha pasado en años anteriores.
La Formación Profesional está viviendo un auge espectacular en todo el Estado y también en Andalucía, donde se da un fuerte desajuste entre una demanda creciente y una oferta estancada de plazas públicas.
Entre el curso 2018-19 y el pasado curso 2021-22, es decir, tan solo en la última legislatura, el número de estudiantes en ciclos de grado medio o superior de FP en Andalucía pasó de 123.558 a 173.701, un crecimiento del 40´3%. Pero este crecimiento no ha sido igual en la Educación Pública (+36%) que en la enseñanza privada (+50%). Así, el porcentaje relativo pública-privada en la FP andaluza se está decantando paulatinamente, en beneficio de la enseñanza privada, concertada o no. Hay que señalar que la adjudicación de ciclos presenciales o duales a centros concertados está provocando un agravio comparativo respecto a los centros públicos en lo que se refiere a la adjudicación de recursos. Destaca el rápido y acusado crecimiento de los ciclos superiores estrictamente privados que han pasado de 12.077 matrículas a 23.835, lo que supone un crecimiento del 98%, o lo que es lo mismo, se ha duplicado en tres cursos.
La Formación Profesional privada es un lucrativo negocio en el que están invirtiendo empresas sin relación previa con la enseñanza, particularmente fondos de capital de riesgo o fondos buitre. Que sean fondos de inversión quienes controlen centros de estudio no parece la mejor garantía de calidad de la enseñanza. Por poner solo algunos ejemplos, los centros de FP de CEAC fueron vendidos al fondo Investindustrial, la empresa CEAC al suizo Crescendo y el fondo norteamericano KKR compró MasterD y MEDAC para construir un gigante de la enseñanza privada.
A principios de este curso, USTEA mantuvo una reunión con la Consejera Patricia del Pozo, en la que se informó del plan de la Junta de crear 20.000 plazas de FP públicas en los próximos años, de las cuales, al menos un tercio, será de FP Dual. En primer lugar, llama la atención que las nuevas plazas previstas no llegan ni siquiera a cubrir la demanda que en este momento se ha visto derivada a centros privados. Por otro lado, la forma en la que se está implantando la FP Dual está cambiando el modelo de formación en centros públicos, que de formar trabajadoras y trabajadores cualificados y con conocimientos de sus derechos, está pasando a generar mano de obra de barata para el enriquecimiento empresarial. De esta forma, el modelo está basculando de lo formativo hacia la precariedad y explotación laboral.
USTEA lleva años denunciando el escandaloso déficit de plazas públicas y reclamando que la fuerte demanda de la FP se cubra con una oferta pública y gratuita suficiente que además afronte estas enseñanzas, no solo como mera capacitación laboral más o menos especializada, sino como una formación técnica integral.
¡Por una FP 100% pública en Andalucía que forme trabajadoras y trabajadores con derechos!