Hoy, en el Día Internacional del Flamenco, en USTEA celebramos una vez más este arte inmenso, Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, que encarna nuestra identidad y cultura andaluza. Sin embargo, junto con esta celebración, es inevitable recordar que numerosas reivindicaciones de la comunidad educativa en relación con el flamenco siguen sin atenderse por parte de la administración educativa andaluza. Desde USTEA, reafirmamos nuestro compromiso en trabajar para que el flamenco ocupe un lugar real y digno en el sistema educativo y cultural andaluz.
En este día debemos reivindicar las raíces del flamenco, algo fundamental para honrar la historia y las luchas del pueblo andaluz y también del pueblo gitano, importante pilar de este arte que ha transformado nuestro panorama cultural. A su vez, es imprescindible reconocer y visibilizar la perspectiva de género en el flamenco, un ámbito donde las mujeres han sido invisibilizadas a pesar de sus enormes aportes. Figuras como La Niña de los Peines, Fernanda de Utrera o La Paquera de Jerez (nombres que, por cierto, no aparecen en ningún centro educativo andaluz), entre muchas otras, enfrentaron barreras sociales y prejuicios de su época, y aún así quedan en la impronta histórica del flamenco por su talento y autenticidad, moldeando el flamenco como lo conocemos hoy. Estas mujeres no solo merecen ser recordadas por su virtuosismo, sino que también deben ocupar un lugar en la enseñanza del flamenco, reconociendo el valor de sus voces y aportando una visión diversa y rica que inspire a las nuevas generaciones en la búsqueda de una verdadera equidad dentro del arte flamenco.
Desde USTEA consideramos muy importante que se fomente y se expanda la implantación de especialidades de Flamenco en los Conservatorios Andaluces. Es necesario que las especialidades de Cante, Guitarra Flamenca y Baile Flamenco estén presentes en todos los conservatorios de Andalucía. En muchas ocasiones la limitación de plazas fuerza al alumnado a desplazarse largas distancias o incluso a abandonar su formación debido a la falta de acceso cercano a estas enseñanzas oficiales. Esta situación no sólo desatiende a quienes desean formarse en estas especialidades, sino que muestra un compromiso insuficiente con un arte que representa a Andalucía en el mundo.
A día de hoy, los centros de enseñanzas artísticas afrontan problemas estructurales que impactan de manera directa en la calidad de la enseñanza. En muchos centros hay problemas por falta de mantenimiento, carencias en infraestructuras o instrumentos, por compartir espacio con otro tipos de centros educativos o por falta de aislamiento, estos hechos limitan el adecuado desarrollo de las clases. Además, el incremento de ratios y la reducción de jefaturas de departamentos impactan negativamente en la calidad educativa, afectando tanto a profesorado como a alumnado.
El desarrollo del flamenco en las aulas del sistema educativo andaluz, regulado por la Ley Andaluza del Flamenco (Ley 4/2023), presenta importantes avances, como la “inclusión de saberes básicos y el desarrollo de situaciones de aprendizaje relacionadas con el flamenco ya sea dentro del horario lectivo o bien como actividades complementarias y extraescolares” o en formación continua del profesorado, pasos que siguen siendo insuficientes ante las demandas reales de la comunidad educativa. No podemos conformarnos con la mera realización de actividades puntuales cada 16 de noviembre. Exigimos una planificación educativa que haga justicia a la inmensidad de este arte y que esté a la altura de las necesidades de la educación artística y cultural del Flamenco.
Desde USTEA celebramos el Día Internacional del Flamenco, recordando que nuestro compromiso y nuestras demandas persisten. Seguiremos defendiendo que el flamenco forme parte esencial en nuestra educación y cultura.
Andalucía, 16 de noviembre de 2024.