Centros de Educación Secundaria masificados y alumnado de Primaria sin centro de adscripción en Dos Hermanas y Alcalá de Guadaíra
Debido al crecimiento demográfico en poblaciones como Alcalá de Guadaíra y Dos Hermanas, este curso ha empezado con importantes carencias: hay centros de Educación Primaria sin Institutos de Secundaria de referencia, adscripciones provisionales a la espera de la construcción de nuevos centros de Secundaria e incluso un CEIP que tienen parte del alumnado adscrito a dos IES diferentes. En estas localidades, las promesas de creación de nuevos edificios escolares se han quedado en eso, meras promesas, siendo la realidad muy diferente.
En algunos Institutos de Secundaria de estas zonas se han realizado reformas de ampliación que han resultado ser parches con el manifiesto incumplimiento del derecho a la escolarización en igualdad de condiciones para este alumnado: se están habilitando espacios para aulas en antiguos baños y en huecos de escalera, se han tabicado bibliotecas o SUM. Se trata de soluciones desesperadas, fruto de la falta de planificación ante el importante aumento del alumnado.
Destaca el caso del IES Albero de Alcalá de Guadaíra que, diseñado para albergar a un número aproximado de 600 estudiantes tiene un censo de más de 1000, o el IES Ibn Jaldun de Dos Hermanas cuya biblioteca está ahora en lo que eran los vestuarios del gimnasio porque la antigua biblioteca se está utilizando como aula.
Esta situación no solo afecta a los centros de secundaria. En la etapa de Primaria el problema es la falta de información por parte de la Delegación, que no hace posible una buena coordinación con los centros a los que debe ir a su alumnado. Muy llamativo es el caso del CEIP Los Cercadillos de Alcalá de Guadaíra, cuyo alumnado no ha podido iniciar el proceso de tránsito con su centro adscrito, como el resto de los compañeros y compañeras de la localidad.
Durante el crecimiento demográfico de esta localidad se crearon dos centros para cubrir la necesidad de plazas escolares, pero la previsión quedó ahí, y no se ha tenido en cuenta que este alumnado pasaría a Secundaria. Hasta el momento, y a cuatro meses de que comience el periodo de matriculación, este alumnado no sabe qué solución propondrá la Delegación de Educación. En estos edificios ya no hay más espacio, por lo que se espera o una mayor masificación con la colocación de caracolas o el desdoble, pasando parte del alumnado a recibir clases por la tarde, lo que limitará notablemente la posibilidad de realizar actividades complementarias para su educación como la asistencia a conservatorios, clases de idiomas o deportes. Con la tradicional pasividad de la CEJA, está claro que para los próximos cursos esta situación no solo se va a cronificar sino que se va a a agravar.
USTEA exige una pronta solución a este problema y más claridad y previsión en la planificación de la escolarización. Las medidas tomadas deben ser consensuadas con la comunidad educativa evitando todo perjuicio al alumnado y profesorado de estos centros.