Ahora, la CE nos propone reformar la Directiva de Permisos Parentales, pero sin tocar la Directiva de Maternidad. Propone 4 meses de permiso parental intransferible para cada persona progenitora (a tomar a lo largo de 12 años), y un nuevo permiso de paternidad de 10 días (a tomar a partir del nacimiento); ambos pagados al nivel de la baja por enfermedad. A simple vista puede parecer un avance, pero en realidad es una trampa muy peligrosa que aumentaría la ya insoportable desigualdad en el uso de los permisos por parte de hombres y mujeres:
– Al estar pagados, la mayoría de las madres prolongaría su permiso de maternidad con esos 4 meses o mucho más, ya que podrían tomarse a tiempo parcial en conexión con la reducción de Jornada. Así, en España, las madres cuidarían a tiempo completo durante los primeros 8 meses o incluso durante todo el primer año.
– Pero esa remuneración (75% en España) no llega al nivel del 80% por encima del cual la mayoría de los padres sí se toman los permisos intransferibles. Además, los 4 meses podrían tomarse con cuentagotas a lo largo de 12 años. Así, en España, lo que se tomarían seguido los padres sería únicamente sus 4 semanas de permiso de paternidad a partir del nacimiento, coincidiendo con la madre (por tanto, ningún periodo al cargo del bebé).
Desde la PPIINA denunciamos las trampas que la Comisión Europea pretende colar en la letra pequeña aprovechándose de una regulación caótica y dispersa cuyos efectos reconoce pero mantiene interesadamente:
Trampa de la remuneración al nivel de la baja por enfermedad: ¿Por qué estos nuevos permisos no estarían pagados al 100% como el de maternidad? Cuidar no es ninguna enfermedad, ni para madres ni para padres.
Trampa de que el permiso pueda tomarse hasta los 12 años: Esta propuesta favorece que los padres se tomen esos 4 meses en días sueltos, en lugar de asumir la misma responsabilidad en el cuidado que la madre durante los primeros meses de vida.
Trampa del permiso a tiempo parcial en conexión con la reducción de jornada: ¿Por qué se llama tiempo parcial lo que en la práctica haría que muchas mujeres se tomaran el doble de tiempo a la mitad de paga?
Trampa de la legislación engorrosa: ¿Por qué dos Directivas separadas para establecer permisos por nacimiento o adopción?¿Por qué en una de ellas se establecen permisos supuestamente iguales “olvidando” que estos son una prolongación de los muy desiguales permisos de maternidad (14 semanas) y paternidad (2 semanas)? ¿Por qué distintas denominaciones, condiciones de disfrute, remuneraciones y otros mecanismos complicados que confunden a la ciudadanía y que eluden el objetivo de igualdad?
Todas estas trampas tienen el mismo efecto: que sigan siendo las mujeres quienes cuidan a los bebés, y que los hombres sigan alejados de ese cuidado durante los primeros meses de vida.
La PPIINA advierte: si esta propuesta de la Comisión Europea se aprobara, supondría un grave retroceso que dificultaría enormemente el camino hacia los permisos iguales, intransferibles y tomados al 100% en todos los países. Las mujeres lo pagaríamos muy caro en el empleo y los hombres seguirían sin poder cuidar en igualdad. Y esta reforma sería muy difícil de revertir.
La Comisión Europea reconoce desde el año 2.000 que el uso equilibrado de los permisos por hombres y mujeres es una condición sine-qua-non para la igualdad en el cuidado y en el empleo. También reconoce que los hombres solo se toman los permisos intransferibles y pagados a más del 80% del salario. Sin embargo, a la hora de legislar se olvida de estas evidencias y de sus propias declaraciones a favor de la igualdad.
La Plataforma Internacional Por Permisos Iguales, Intransferibles y Pagados al 100% (PLENT), de la que forma parte la PPIINA, lleva 7 años reclamando la sustitución de las dos directivas actuales por una única directiva que establezcapermisos iguales, intransferibles y pagados al 100% para cada personas progenitora.
¡Basta de trampas, exigimos igualdad real ya!