Nuestro país vive un momento esperanzador: ante las impresionantes movilizaciones feministas, el nuevo gobierno tiene la oportunidad de mostrar su voluntad de cambio. La reforma de los permisos igualitarios no solo emitiría un mensaje claro a toda la población sino que promovería un cambio real clave para el reparto equitativo de los cuidados y del empleo entre hombres y mujeres.
A lo largo de 13 años de trabajo, en la PPIINA hemos llegado a la reforma que proponemos: un permiso de igual duración para cada persona progenitora (16 semanas), completamente intransferible, íntegramente pagado al 100% durante todo el periodo y sin trampas que impidan su uso igualitario. Este permiso está dividido en dos partes: las 2 primeras semanas en las que la madre tiene que recuperarse del parto y ser cuidada (permiso parental inicial) y otras 14 semanas a tomar durante el primer año (permiso parental para la crianza).