Desde la Confederación de STEs-Intersindical (Sindicatos de Trabajadores y Trabajadoras de la Enseñanza), a la que pertenece USTEA, queremos denunciar la falta de implicación de las instituciones ante nuestro colectivo: docentes, personal laboral y administrativo, alumnado y toda la comunidad educativa en general, sector afectado de forma notable por la pandemia de Covid 19.
Consideramos que el ámbito docente conforma un grupo de alto riesgo, al tiempo que realizamos un trabajo esencial para la sociedad. La Administración debería tener en cuenta este hecho que se concreta en los contactos continuos y la interacción que se produce en nuestro ejercicio profesional.
Los datos más recientes señalan que el personal docente, con su trabajo en primera línea, se sitúa ya como el tercer colectivo más afectado por número de contagios. Pedimos que se tengan en consideración estos datos, con más de un 10% de bajas laborales según las últimas estadísticas, a la hora de organizar la segunda fase del proceso de vacunación. El profesorado, para mantener su función de trabajo esencial, necesita hacerlo con la seguridad necesaria e imprescindible. En este sentido, conviene recordar que entre el personal docente se encuentran profesionales que trabajan con alumnado menor, asintomáticos en muchas ocasiones, que no llevan mascarilla, o quienes lo hacen en el ámbito de la Educación Especial.
Como Confederación de STEs-i, exigimos a todas las Administraciones Educativas que se nos transmitan cada semana los datos relativos a bajas, contagiados/as, incidencia por grupos de trabajo, etc. para que, como agentes implicados, podamos hacer nuestra función de prevención en salud y seguridad en nuestros centros de trabajo.
Por otra parte, también demandamos que actúen para que el profesorado, alumnado y personal no docente puedan tener las mayores garantías de seguridad y salud en los centros educativos, asumiendo las Administraciones la distribución y los gastos derivados de ello. En este sentido, consideramos imprescindible:
- Suministrar EPIs adecuados para el ejercicio docente con la protección máxima, mascarillas FPP2, que atajen de verdad nuestra exposición a los aerosoles, el mayor propagador de este patógeno.
- Dotar de micrófonos portátiles al profesorado que lo requiera. El hecho de que haya 25 alumnos/as en aulas muy pequeñas, con las mascarillas puestas durante 6 horas, hacen que nuestra salud foniátrica peligre.
- Suministrar a todos los centros el material suficiente de limpieza y desinfección, así como el personal necesario, para que nuestras aulas y espacios comunes estén desinfectados convenientemente y que no recaigan esos gastos y su gestión en los centros.
- Dotación, a todos los centros educativos, de material para la medición de CO2 y filtros HEPA, que se están demostrando necesarios tal como el propio Ministerio de Sanidad ha recogido en sus últimas guías editadas.
- Estudio y modificación de los niveles de riesgo en nuestro colectivo. Tenemos una incidencia que supera el 20% de aulas cerradas, aunque extraoficialmente sea mayor. Esto significaría también una adaptación de las condiciones de prevención.
Por todo ello, como Organización Sindical que defiende a sus trabajadores/as, los STEs-Intersindical seguiremos vigilantes en este proceso, para que no sólo se escuchen palabras de agradecimiento a la labor del profesorado, sino que se traduzca en respeto y, sobre todo, compromiso de cumplir con estas medidas que consideramos imprescindibles para el correcto desarrollo de nuestra vida profesional.
¡POR UN TRABAJO DOCENTE DECENTE!
Sr. Ministro de Sanidad del Gobierno de España.
Sra. Ministra de Educación y FP.