En la Mesa Sectorial celebrada hoy, 10 de junio, hemos abordado las instrucciones para el principio de curso 2020/21. Desde la Consejería nos insisten en que se han elaborado para regular solo los aspectos pedagógicos, dejando para más adelante las medidas organizativas, a la espera de los resultados de la Conferencia Sectorial Ministerio-Comunidades Autónomas y de las oportunas instrucciones de la Consejería de Salud.
A nivel general nos parece que sin la concreción de las mencionadas medidas organizativas, ya sea el desdoblamiento de grupos, el establecimiento de turnos, la implementación de apoyos y refuerzos, la disminución de ratios, reducción del horario lectivo, etc., estas instrucciones son un “brindis al sol”, ya que necesitan un aumento considerable de plantillas y de recursos materiales, e incluso una adecuación de las infraestructuras, para cumplir con los propósitos que en ellas se plantean.
En algún momento de la reunión la administración ha puesto en duda nuestra confianza en el profesorado y en los equipos directivos para poder llevar a cabo con éxito la tarea, como han venido demostrando en los últimos meses. No entendemos la duda, pero ya le hemos aclarado que no solo confiamos en el profesorado, sino que además queremos cuidarlo y defenderlo. Nuestra desconfianza no es precisamente hacia las trabajadoras y los trabajadores de la Enseñanza Pública, sino hacia quienes deben procurarles los medios, las herramientas y las instalaciones para que puedan desarrollar su labor en condiciones dignas y ofrecer un educación de calidad. Y el recelo no es gratuito, no hay más que revisar la historia reciente de nuestro sistema educativo para comprobar cómo persisten las carencias en todos los aspectos.
Por otra parte desde USTEA hemos planteado la necesidad de contemplar entre los escenarios posibles la simultaneidad, y no solo la alternancia, de la educación presencial y telemática, con todas sus implicaciones relativas a la jornada laboral, volumen de trabajo, coordinación docente, comunicación con las familias…
En definitiva, trasladamos a la Consejería nuestra oposición a que se apliquen estas instrucciones en cualesquiera circunstancias, la exigencia del reconocimiento de su inviabilidad en caso de no producirse los refuerzos materiales y personales suficientes y necesarios y nuestro rechazo al aumento de las tareas burocráticas del profesorado. Además le emplazamos a seguir trabajando en las órdenes y decretos curriculares que debieran haber sido marco general para estas instrucciones, una normativa sobre la que ya hemos realizado numerosas aportaciones que no hemos visto tenidas en consideración.
Al margen de estos asuntos, la Consejería nos anuncia que es previsible una incorporación del profesorado el día 16 de junio, toda vez que termina el Bachillerato y las Universidades también tienen sus urgencias. Quedamos a la espera de una próxima reunión la semana que viene.