Desde USTEA, en este Día Internacional de la Democracia, reafirmamos nuestro compromiso con los valores democráticos que sostienen una sociedad justa, igualitaria y libre. La democracia no es solo un sistema político, sino una forma de vida basada en el respeto, la justicia social, la participación ciudadana y la defensa de los derechos humanos.

En un contexto preocupante de crecimiento de discursos de odio, bulos y desinformación promovidos por sectores de la ultraderecha, especialmente en el ámbito educativo, es más necesario que nunca reivindicar una escuela pública, crítica, inclusiva y feminista. La democracia se construye también en las aulas, educando en el pensamiento crítico, en el respeto a la diversidad y en la capacidad de disentir sin odio.

Frente a quienes intentan imponer una visión autoritaria, negacionista y excluyente, defendemos con firmeza:

• Una educación pública y laica como pilar de igualdad y justicia social.
• La igualdad real entre mujeres y hombres, y la incorporación del feminismo como herramienta pedagógica para construir una sociedad libre de violencias machistas.
• Los derechos del colectivo LGTBIQ+, frente a intentos de retroceso y censura educativa.
• La memoria democrática, como garantía de no repetición frente a los crímenes del franquismo y de cualquier forma de totalitarismo.
• La lucha contra los bulos, la manipulación informativa y las campañas de desinformación que intentan socavar los derechos conquistados y fomentar el odio.

Desde USTEA hacemos un llamamiento a toda la comunidad educativa a mantenerse alerta, organizada y activa en la defensa de una democracia viva, participativa y radicalmente comprometida con los derechos humanos. Solo a través de una ciudadanía formada, consciente y crítica podremos frenar el avance del autoritarismo y construir un futuro digno para todas las personas.

Porque la democracia no se hereda, se defiende y se ejerce cada día.
Hoy más que nunca, ¡educación para la democracia y democracia para transformar!