Acudimos a la convocatoria de la que quizás sea la última Mesa Sectorial con el actual equipo de la Consejería de Educación sin conocer qué vamos a tratar, con el único punto del Orden del Día “Curso 2022/2023”.

Encontramos, una vez allí, que el objeto de la misma es establecer criterios para la distribución de unos 1680 cupos para las primeras adjudicaciones de SIPRI en septiembre, una vez que nos informan también de que en la colocación de efectivos se adjudicarán 2620 cupos extra a modo de “consolidación” tras haber pasado la excepcionalidad de las medidas sanitarias reinantes los últimos cursos y por tanto no poder disponer de los cupos COVID para el próximo curso.

Agradecemos el esfuerzo que haya podido realizar la consejería en la “consolidación” de esta oferta extraordinaria para la colocación de efectivos que irá dirigida a: Coordinación con salud, Formación Profesional, Prospectores de FP, Asesores/as de Transformación Digital, Coordinaciones TDE, Transfórmate y Orientación; pero no podemos sino señalar que esta oferta extra es del todo insuficiente, y siguen en la línea de parchear la plantilla docente sin hacer una transformación estructural de la misma. Añadimos que esta dinámica de trabajo de la CED, el aquí te pillo-aquí te pido que me hagas aportaciones, es bastante complejo, por no decir inviable, ya que imposibilita la toma de decisiones al respecto, con unas cifras que desconocemos al inicio de esta mesa sectorial, y sin el necesario conocimiento interno previo de los datos que maneja la administración, por la falta de transparencia habitual, para poder trabajarlos en la organización.

En nuestra intervención hacemos referencia a la importancia de la bajada de ratio generalizada en todos los niveles educativos para garantizar la calidad de la enseñanza, que los refuerzos deben ir encaminados a paliar las situaciones, denunciadas año tras año, de ratios ilegales en multitud de aulas de los centros educativos públicos de la comunidad; que, tras la aprobación del Programa de Unidades de Acompañamiento y Orientación Familiar y Personal, se financia con fondos europeos la asistencia de Orientadores y Orientadoras en centros concertados en zonas ERACIS mientras que se ha dejado fuera de este programa a un centenar de centros públicos y a su alumnado, negándoles de facto la posibilidad de obtener los recursos personales y materiales necesarios para atenderlos por el sistemático bloqueo que la Consejería ha hecho durante toda la legislatura de las peticiones de solicitud de los Planes de Compensatoria, elaborados por los centros, como herramienta eficaz para adaptarse a la cambiante situación socio-educativa de la comunidad donde están insertados.

Sumamos a estas cuestiones la incertidumbre, al no haberle dado cabida en esta mesa sectorial, a ¿qué va a pasar con las oposiciones de los próximos cursos? ¿Cómo se distribuirán las plazas en cada modelo de oposición? ¿Se coordinarán todos los territorios para no llegar al caos organizativo de las mismas? ¿Cuáles han sido los datos de supresiones de unidades de cara al próximo curso? ¿Qué número de nuevos ciclos formativos se han autorizado en los centros públicos frente a los de la privada y la privada-subvencionada?, cuestiones pendientes que habrá que tratar de manera urgente con el nuevo equipo (o quizás no tanto) de la Consejería de Educación.

USTEA seguirá defendiendo los derechos de las y los trabajadores de la Educación Pública, en particular, y de la comunidad educativa, en general, de los ataques a los que estamos sometidas por las políticas privatizadoras, encaminadas a desmantelar y a repartir el servicio público con criterios mercantilistas y economicistas, despojando al sistema de educación pública del papel fundamental que tiene en nuestra sociedad: la equidad real. 

Andalucía, 12 de julio de 2022

#USTEAdaLaCara